La comunicadora y editora gráfica dirige esta comunidad que reúne a curiosas y creativas estudiantes en torno a la ciencia y las artes.
Kuriotik, un portal digital de aprendizaje, inspirada en un juego de palabras con la palabra curiosidad, fue imaginado a fines del 2019. La pandemia postergó los planes de llevarlo a cabo, pero finalmente el 25 de marzo de este año vio la luz y desde entonces una decena de niñas entre los 8 y 12 años han podido desarrollar sus capacidades y responder sus preguntas respecto a disciplinas tradicionalmente asociadas con el género masculino: las STEAM.
Las STEAM (siglas en inglés de ciencias, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas) son la columna vertebral de Kuriotik, un espacio seguro pensado y protagonizado por las niñas y dirigido por Lucero Del Castillo, quien tiene más de 12 años de experiencia desarrollando proyectos sobre identidad y género como comunicadora, editora gráfica, fotógrafa para medios masivos y artista visual.
Lucero es, además, docente universitaria porque cree en la educación como arma de transformación social y actualmente es candidata a Magíster en Antropología por la PUCP. Investigar y diseñar proyectos de innovación social es su principal quehacer y Kuriotik se ha sumado a esa valorada lista.
Sé que Kuriotik nace a partir de un proyecto fotográfico sobre dos niñas que tenían muchas preguntas. ¿Qué te impulsó finalmente a crear la plataforma para resolver esa situación?
Sí, en algún momento me crucé con esta ONG llamada Mactec Perú y allí conocí a estas dos niñas que son protagonistas de la historia que aparece en la web de Kuriotik. Quise hacer un fotolibro para contagiar a otras niñas y desterrar esta dicotomía de ciencia versus el arte, que si bien poseen aproximaciones distintas, tienen en común algo de lo cual yo no era muy consciente en ese momento. Eso me llamó la atención.
También me di cuenta que en el mundo de las ciencias, ingeniería y tecnología, en general, en las STEAM hay una brecha de género. Entonces dije bueno hagamos un fotolibro que apunte a esos objetivos. Se dio la oportunidad de postular a este concurso de los estímulos económicos del Ministerio de Cultura, pero llegó la pandemia.
Pensé qué hago con toda esta chamba que se realizó y me dije “con el mismo objetivo, haré algo digital”. Una comunidad donde se pueda compartir todas estas ideas. Ya después se ha ido perfilando un poco más hasta lo que es ahora: un espacio que busca promover la innovación social protagonizada por niñas.
A través de las herramientas del STEAM, se busca que las niñas discutan y reflexionen sobre distintas problemáticas, desde su mente y que nosotras seamos ese espacio donde ellas puedan desarrollarlo.
Sobre todo un espacio seguro. Porque cuando se habla de espacio digital hay tantos riesgos o peligros, especialmente para las niñas…
Sí, cuando uno entra a la plataforma, hay que inscribirse siempre a través de un adulto. Y dentro de ella no hay interacciones de manera privada. Nuestro equipo de voluntarias lo están monitoreando: se pueden borrar comentarios, eliminar cuentas, con el fin de que sea un espacio seguro.
¿Por qué se dirige solo a chicas?
Sabemos que la educación debe ser mixta y de todos los géneros, pero así como parto de eso, porque además la realidad es así, también hay que reconocer que existen brechas de género. Y mientras existan estas brechas hay que fomentar espacios para que las niñas se sientan no solo seguras sino también empoderadas, ya que (en la plataforma) van a poder ver a estas modelos profesionales como una mujer ingeniera o científica. ¿Y por qué solo de 8 a 12? Porque desde los 8 porque ya entienden mejor lo que leen y hasta los 12 porque con la preadolescencia vienen otros intereses: qué carrera voy a elegir, por ejemplo.
¿Qué les preocupa a las niñas de 8 a 12 años? ¿Qué inquietudes son las más requeridas?
En la web nosotras tenemos una ruleta con preguntas hechas por las mismas niñas. Hay de todo tipo, tienen que ver con el espacio y el universo, la ciencia (¿cómo se hacen las vacunas?), curiosidades sobre mascotas (¿por qué a un gato se le agrandan las pupilas?), si existen los fantasmas o los extraterrestres, y aspectos de la naturaleza (¿cómo se formaron los océanos?).
Ahí están las voluntarias que no responden, sino que amplían las preguntas. Se encargan de iniciar la conversación, provocar algo en las niñas. Ellas mandan sus propios dibujos y a partir de ello se reflexiona. La educación tradicional está muy orientada a responder preguntas pero no a hacerlas. Y es difícil, porque hacer una buena pregunta abierta va a detonar hacia una buena investigación. Aún existe un miedo a decir no sé o equivocarte y eso hace que la curiosidad muera en las niñas.
¿Cómo llegan las niñas a esta plataforma?
Ha sido orgánico, no hemos ido a los colegios. Se han ido enterando a través de las voluntarias, o por alguna nota de prensa que salió, pero previo a ello ya teníamos una comunidad de 40 y de ahí fuimos creciendo. Actualmente, son 60 niñas en total quienes van interactuando asincrónicamente, hay unas donde interactúan más, otras menos.
La otra forma de trabajar es por proyectos con una línea de trabajo de inicio a fin. Vamos a empezar uno con el MAC a través de sus muestras. Las niñas provienen de Arequipa, Lima, Puno, Ucayali, Huánuco Cajamarca, La Libertad, Piura, Ayacucho, Madre de Dios e Ica. Necesitan acceso a internet, laptop o PC, pero ahora mismo estamos trabajando para llegar a celulares.
¿Cómo se involucra la familia?
El registro es a través de los mails de los papás y de ahí pueden agregar el correo propio de las niñas. Cuando hagamos encuentros por Zoom nos gustaría que esté la familia. En las escuelas, algunos profesores con los que he hablado me han dicho que Kutiotik podría ser usado en las aulas. En UTEC, por ejemplo, se trabajan talleres solo para niñas de colegios públicos, quienes también pueden aprovechar Kuriotik.
Apoyo del Estado
Kuriotik es hoy una realidad gracias al financiamiento del Programa Nacional de la Innovación para la Competitividad y la Productividad (Innóvate Perú) del Ministerio de la Producción, que apunta al objetivo de cerrar las brechas de género en el campo de las ciencias en el país.
¿Es sencillo es postularse?
Nunca antes había postulado a algo así. Sí, hay un proceso, toma tiempo porque hay que pensar en armar el proyecto, justificarlo, mapear cosas, cómo lo vas a hacer, en ese sentido es trabajoso, y hay que tener mucha claridad en lo que quieres. ¿Qué estás buscando? Identificar el problema es lo principal y qué voy a hacer para solucionarlo. Allí hay dos posibilidades de que puedas obtener un financiamiento. Yo postulé con una idea base que luego se fue complejizando. Empezó como un foro y terminó en una plataforma virtual. Todo este proceso me tomó dos meses. Cuando ya tenía todo listo, recién inicié la convocatoria de voluntarias.
¿Cuántas personas pertenecen al equipo?
Son 14 voluntarias que han aceptado y se han unido al proyecto en una. Yo tenía una mala concepción del voluntariado, el de siempre dar sin recibir nada a cambio, pero con Kuriotik cambié mi percepción. Para mí este proyecto es hacer activismo, llevar a cabo una acción.
Las voluntarias también publican notas STEAM tres veces por semana para las niñas. Es otra manera de enganchar con ellas. Vamos a empezar a trabajar alianzas con divulgadores y organizaciones, ya que estos primeros meses nos han servido para ir asentando y conocer nuestras limitaciones y alcances.
Kuriotik es un proyecto imprescindible en esta coyuntura…
Sí, debido a que el enfoque de género no es prioridad, no solo hablando de la educación. Y sí, tiene que ser ese caballito de batalla que siga, así como pueda, con quienes se quieran unir, instituciones que apuesten y digan “compro”. En Kuriotik las niñas son las protagonistas y son el presente. Nos importa lo que ellas tienen que decir ahorita, esta experiencia las enriquece.
¿Qué te hubiera gustado saber al inicio del proyecto para llevarlo a cabo mejor?
Como todo fue muy rápido y fue creciendo, me hubiera gustado hacer un poquito de más investigación sobre las niñas, saber cómo piensan en todo el Perú, saber sus intereses y gustos.
Más información
El funcionamiento de Kuriotik es sencillo. Las jóvenes usuarias formulan preguntas sobre ciencias, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas a 14 especialistas voluntarias mujeres, que responderán y promoverán una conversación que invite a las niñas a profundizar, cuestionar, investigar y descubrir. También las niñas pueden intercambiar y responderse entre ellas.